¿QUÉ PASÓ?, ¿EL PORQUÉ DE UN NUEVO MINISTERIO DE SEGURIDAD CIUDADANA EN COLOMBIA?

Estrella Policial – Publicación del Colegio de Generales de la Policía Nacional de Colombia, edición agosto y septiembre de 2013. 

Periódico de ACORE edición mes de septiembre 2013.

Periódico ACORPOL – edición mes de septiembre de 2013.

Desde el momento en que la Asociación de Retirados de la Fuerza Pública Nacional “UNDERPONAL”, conoció el proyecto sobre la creación del  Ministerio de Seguridad Ciudadana presentado por el Doctor  Augusto Posada, representante a la Cámara por Antioquia, surgieron los siguientes interrogantes: ¿Qué pasó?, ¿el porqué de un nuevo Ministerio de Seguridad Ciudadana en Colombia, donde su principal protagonista es la Policía Nacional de los Colombianos?.

Pero lo preocupante es que el solo hecho de pensar en un nuevo Ministerio y al llegarse a implementar, le costaría al pueblo colombiano mucho dinero, el cual lo asumiría cada ciudadano por esa iniciativa que no es necesaria. El costo del  nombramiento de un Ministro y su equipo de trabajo, es considerable también, pero quienes tenemos contacto con el ciudadano en Bogotá y la provincia, se escucha a gritos, que haya racionalidad en el gasto público. Lo que se debería hacer es mejorar lo que hay y apoyar más el talento humano de la Policía Nacional. El ciudadano necesita efectividad, que cuando el policía conozca de la comisión de un delito, el policía tenga la suficiente autoridad para conducirlo hasta el funcionario público, sin que en contados momentos el delincuente salga por la siguiente puerta. Eso es lo que necesitan el ciudadano y el policía. En eso se deben centrar los parlamentarios y el gobierno. El ciudadano quiere que esa situación de flagrancia y cuasiflagrancia que a cada momento sucede en nuestras calles colombianas,   sea resuelta en el menor tiempo posible y que no se vean burlados, el policía, el ciudadano y el juez por la laxitud de las herramientas jurídicas.

Estamos seguros en “UNDERPONAL”, que la creación de un nuevo Ministerio, no resuelve los problemas en materia de seguridad ciudadana y menos las inquietudes salariales que le adeudan a la Reserva Activa Policial.

Los interrogantes continúan: ¿Por qué sustraer a la Policía Nacional de los Colombianos, de la dependencia del Ministro de Defensa?, ¿acaso al pasarla de un Ministerio a otro, ayudaría para mejorar la calidad de vida de los policiales activos y sus reservas activas?, o es simplemente por cumplir un tema de acuerdo de las negociaciones de la Habana, si eso es así, sería desacertado para cada colombiano y la incertidumbre de los activos y sus familias generaría desconcierto en las nuevas políticas laborales y sociales de los policiales y sin dejar de lado a la Reserva Activa Policial.

Dentro del transcurrir histórico de la Policía Nacional, Colombia ha ganado desde que llegó al Ministerio de Guerra, hoy Ministerio de Defensa. Pasarla a otro Ministerio como es la propuesta, seria riesgoso porque afectaría la cohesión que se ha ganado entre las FF.MM y la Policía Nacional por muchos años.  Las operaciones militares y policiales han dado grandes resultados. La dependencia del señor Ministro de Defensa, es y sigue siendo acertada, dividir es debilitar.

Algunos se centran en plantear que somos de naturaleza civil, claro que es de naturaleza civil y por constitución está definida así. Pero hay que entender que las circunstancias de estos últimos 52 años donde la policía le ha tocado asumir tareas conjuntas con las FF.MM para contrarrestar a los violentos, colocando una gran cuota de sacrifico, esa dependencia del Ministro de  Defensa es para los colombianos un éxito. Entonces, ¿por qué desean incluirla en un Ministerio nuevo donde quedará relegada a un tercer plano?, ¿por qué no se valora lo que ha hecho en los más de cien años de existencia?.

Una propuesta lógica, precisa, de sensibilidad y urgente que ayudaría, es hacer justicia con los agentes de la Reserva Activa Policial, reajustando la Prima de Actividad porque no fueron  incluidos en el artículo segundo del decreto 2863 de 2007, al igual estructurar una política de cumplimiento de la Ley 4 de 1992 para cancelar la Nivelación Salarial, sentencias y conciliaciones por concepto de I.P.C. entre otras, esto para que a CASUR y TESORERIA GENERAL le apropien  recursos y pueda pagar oportunamente.

También una política económica mediante un plan estratégico que incremente recursos para: mejorar el Bienestar del personal activo y reserva activa, poder contratar especialistas en el subsistema de sanidad policial, poder contratar profesores en los colegios policiales y resolver los ascensos del nivel ejecutivo. 

El Gobierno y el Congreso deberían presentar un proyecto macro, sería algo histórico, que le agradecería la familia policial y motivaría al personal activo, como es la creación de un  Centro Geriátrico para brindar bienestar a aquellos hombres y mujeres de la Reserva Activa Policial, que prestaron un servicio al país en su juventud y edad madura, lo justo es que en sus años dorados reciba apoyo en su soledad, falta de cariño y atención esmerada en las enfermedades propias de su edad y su servicio prestado. Este sería un buen proyecto macro del Congreso y el Gobierno para su Reserva Policial de CASUR y TEGEN. Es lo que hay que hacer antes que pensar en un nuevo Ministerio de la Seguridad Ciudadana.

Esa sí, que sería una buena iniciativa parlamentaria y una verdadera voluntad política del Gobierno Nacional, lo cual se reflejaría más en eficacia, efectividad y un mejor clima organizacional de los activos y reservas activas.

Pensar cómo mejorar los salarios, pues qué ciudadano no quiere que sus policías sean eficientes, pero él también entiende que se le debe pagar lo justo.  

Otra propuesta lógica, antes de pensar en un Ministerio de Seguridad Ciudadana, es presentar una iniciativa parlamentaria y gubernamental para que el policía tenga más herramientas para poder actuar frente al delincuente en la comisión de delitos desde el simple al de mayor impacto, vemos cómo por vacíos en los códigos, el policía ve burlado la acción del policía en el momento de la retención de un delincuente, ejemplo de los menores de edad.

Los resultados de las negociaciones de paz, no tienen por qué afectar la buena marcha de las instituciones como la Policía Nacional, que lo único que ha hecho es contrarrestar el accionar de las personas que no se ajustan a esta democracia, el  posconflicto es para poner en orden lo que estaba en desorden,  y no para relegar en un tercer o cuarto plano a la Policía Nacional de los colombianos.

Por: DG. (P) JOSE ABIGAIL ROJAS SALAZAR

                      Presidente de “UNDERPONAL”

Artículo publicado. 

Estrella Policial – Publicación del Colegio de Generales de la Policía Nacional de Colombia, edición agosto y septiembre de 2013.

Periódico de ACORE edición mes de septiembre 2013.

Periódico ACORPOL – edición mes de septiembre de 2013.