LA CRONICADELQUINDIO.COM, Autor: Edith Morales Gómez
Al ser humano casi no le importa el ser, le preocupa y le desespera el tener. La mayoría de las personas viven con el afán de acumular cosas, dinero, conseguir lo material se ha vuelto lo más importante en la vida de la mayoría de los humanos, lo que lleva al mundo a una crisis de valores muy grave, por eso muchos aparentan lo que no son.Muchas personas se sienten inseguras cuando no pueden conseguir cosas materiales, como un vehículo u otros artefactos que supuestamente le dan estrato a la gente; casi todo el mundo valora la riqueza por las cosas materiales que se poseen; por eso el vacío emocional que se crea, lleva a los individuos a ostentar cosas materiales, sin ni siquiera estar con los ingresos suficientes para tenerlas, muchos por aparentar hasta aguantan hambre porque sus deseos consumistas los vuelven infelices, sin dignidad ni autoestima, el consumismo desaforado los lleva a comprar o a endeudarse compulsivamente con todo cuanto el mercado les ofrece, porque esperan que esas cosas, llenen sus vanos ideales.Por eso todo se vuelve vacío, fugaz, sin sentido, la continua necesidad de comprar jamás será satisfecha porque uno no puede esperar que la satisfacción personal venga de lo comprado, eso jamás será así. La felicidad no debe buscarse en las cosas materiales, más bien hay que buscarla en el ser, es decir, dentro de nosotros porque es allí donde está la carencia, hay algunas personas que son felices sin muchas cosas, ni siquiera les importa tener el equipo celular de última tecnología, tampoco se preocupan por endeudarse con un vehículo, aunque haya presión social por conseguirlo.Las casas, los roperos y demás espacios están llenos de cosas que no son usadas, están llenos de basura, porque la gente generalmente compra para acumular cosas innecesarias, muchas veces nos antojamos de cosas que solo usamos una sola vez y luego no sabemos qué hacer con ellas, algunas personas las regalan, otras las botan, otras las guardan por si alguna vez vuelven a necesitarlas.El ser humano quiere ser siempre feliz, pero la búsqueda de la felicidad, parece ser una utopía, nadie anda satisfecho con lo que es o con lo que tiene, por eso la felicidad, consiste en obtener sabiduría y riqueza espiritual, estas son las únicas que traen tranquilidad y paz interior. Está comprobado que el dinero que acumulan los que pueden, nunca es suficiente, el que tiene siempre quiere tener más y por eso vive en desasosiego y desespero, nunca es feliz, nunca está tranquilo, porque siempre nos han enseñado o hemos crecido reconociendo y dando valor a lo de afuera, no a lo de adentro, son muy pocas las personas que logran reflexionar y/o pensar que lo más importante en la vida son los valores, la reflexión constante, la meditación.Las personas que meditan nunca ponen las cosas materiales por encima de lo espiritual y son más felices, tranquilos y realistas, mientras que los materialistas, siempre andan sedientos de más objetos y son generalmente quienes creen, que sin acumular cosas o dinero no pueden vivir. El dinero, al igual que el consumismo es una esclavitud, que nos vuelve inhumanos, muchos de los adinerados, carecen de sabiduría o tienen la cabeza hueca, de ahí la frase: “hay gente tan pobre que no tiene sino dinero”.
edith1503@hotmail.com
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