martes, 13 de diciembre de 2016

Congreso, con poco margen para tributaria....R.T.

ELNUEVOSIGLO.COM.CO, Redacción Economía,
Bogotá, Diciembre 11, 2016


Foto archivo El Nuevo Siglo

En su etapa definitiva entra esta semana la reforma tributaria en el Congreso de la República. Entre martes y miércoles las plenarias de Senado y Cámara le harán debate al articulado que fue aprobado por las comisiones económicas conjuntas el pasado martes y que dejó serios reparo a la forma como fue tramitada la iniciativa gubernamental.
Hay muchas opiniones sobre si la reforma es estructural o no. Para los gremios de la producción, lo aprobado en las comisiones económicas tiene muy poco de ello, y más bien es un afán del Gobierno por aumentar los recaudos.
Para voceros parlamentarios es muy poco lo que se puede hacer en las plenarias de Senado y Cámara al articulado que viene de las comisiones pues el Gobierno cuenta la las mayorías que defenderán la propuesta tal y como salió aprobado el pasado martes.
Uno de los temas que seguramente tendrá mayor discusión por parte del Congreso será el del IVA. Son muchos los sectores que se oponen pero no logran el consenso suficiente para evitar que el impuesto suba tres puntos del 16% al 19%.
El senador del Centro Democrático, Iván Duque, dijo que se opone porque la economía se ha desacelerado a su punto más bajo de los últimos años, la inflación es alta, la confianza del consumidor cae, y subir este impuesto afectará a los más vulnerables y a la clase media.
¿Cuantas toneladas de mermelada utilizó el Gobierno para que se aprobara la reforma sin ninguna discusión? Se preguntó el senador Jorge Enrique Robledo, y concluyó: la única forma de tumbar este esperpento de reforma es que la gente exija en las calles y en las redes sociales su hundimiento.

La visión desde los empresarios
El presidente de la Asociación Nacional de Empresarios de Colombia, Bruce Mac Master, señaló que la competitividad del país está en manos del Congreso de la República.
La competitividad del país en manos del Congreso
Según Mac Master en los dos últimos años hubo consenso entre Gobierno, legisladores, académicos, periodistas y empresarios sobre el hecho de que Colombia es el tercer país con mayor tasa de tributación efectiva en América y el noveno en el mundo. Este hecho parece haber sido olvidado por muchos de los que hasta hace dos meses lo pregonaban a los cuatro vientos.
En 2014 nos enfrentamos, dijo, “a una reforma tributaria que, en nuestra opinión, era totalmente lesiva para la actividad económica; expusimos nuestras razones, fueron ignoradas en lo aprobado. Como resultado de las preocupaciones expresadas en ese momento, el sector empresarial y emprendedores colombianos recibieron la promesa de adelantar una ‘reforma tributaria estructural para la recuperación de la competitividad’”.
Desde el punto de vista de estabilidad macroeconómica, no debería haber ninguna duda sobre la necesidad de tramitar la reforma. El reto, entonces, es tramitar en una semana una buena reforma, una reforma que asegure la estabilidad fiscal, al tiempo que construya competitividad. No hacerlo en esta ocasión sería un error histórico.
“En justicia, hay que reconocer que el proyecto, desde el punto de vista de procedimientos, ampliación de base gravable, aplicación de normas internacionales, y en términos de lucha contra la evasión, incorporaba mejoras. Sin embargo, del proyecto original a la ponencia aprobada se perdió una buena parte de su carácter estructural”, aseguró.
Sostuvo el dirigente gremial que “hablemos de competitividad. Cometieron una gran equivocación las voces que trataron de generar la idea de que el proyecto de ley, hoy la ponencia aprobada por las comisiones económicas, reduce los impuestos a la actividad empresarial. Jugando con las palabras y transmitiendo una verdad a medias, crearon la sensación entre muchos de que la reforma bajaba la tributación para la actividad empresarial. Este mensaje probablemente indujo al inmenso error de aumentar aún más los impuestos a la actividad empresarial en la aprobación de comisiones del Congreso.
El resultado final es que para la actividad empresarial, nuevos emprendedores, nuevas inversiones nacionales e inversión externa, la tasa efectiva final para invertir en Colombia seguirá siendo una de las más altas del mundo.
Una de las mayores preocupaciones reside en que la tasa compuesta de renta más dividendos es mayor que la tasa compuesta actual de renta más Cree. Otra, en que las tasas de renta propuestas son significativamente mayores que las tasas de los países pares de Colombia. Es decir, no somos competitivos y no lo seremos, de no corregirlo.
De aprobarse la actual propuesta, en el 2017 el impuesto de renta sería del 40 por ciento y el impuesto de renta presuntiva se incrementaría un 33 por ciento, pasando del 3 al 4 por ciento. Países como Perú, México y Chile tienen impuestos de renta que se mueven entre el 25 y el 28 por ciento. Adicionalmente, se crearía un impuesto a los dividendos del 10 por ciento.
En el 2018 la situación sería similar. A partir del 2019, el impuesto de renta sería del 33 por ciento, la renta presuntiva sería del 4 por ciento y tendríamos el impuesto a dividendos. La ley actual habla de un impuesto único de renta del 34 por ciento.
No solo no hay mejora, sino deterioro importante. Es de verdad esta una oportunidad única para crear una estructura tributaria competitiva, crear empleo formal, aumentar el producto, enfrentar los mercados y competir, atraer inversión, generar bienestar. “Ojalá se tomen las decisiones correctas y no tengamos que soñar tres años más con la ‘reforma tributaria estructural’”, concluyó Mac Master.

Una visión diferente
Un informe de la Asociación Nacional de Instituciones Financieras, Anif, reveló que las empresas extranjeras pagan menos impuestos en Colombia que en Chile.
La apreciación se hizo en medio de las discusiones alrededor de la reforma tributaria en el Congreso de la República.
Anif dijo que ha venido advirtiendo sobre la tragedia de los comunes que viene presentándose en la discusión tributaria de Colombia. Allí todos los sectores, hogares y gremios empresariales, quieren continuar usufructuando el presupuesto público, pero sin estar dispuestos a aportar esfuerzo tributario adicional.
El último sainete-empresarial, señala el centro de estudios económicos, de esta tragedia proviene de reparos al impuesto a los dividendos. Para entrar a calificar esta propuesta de anti-competitiva lo primero que debe hacerse es analizar cuál es la práctica internacional, por ejemplo, en países vecinos.
Aun si se aceptara el argumento de sumar directamente el gravamen a la firma con el de la persona natural, se encuentra que la tasa propuesta para una firma extranjera operando en Colombia sería del 38,8%.
Pues bien, según Anif, esta cifra propuesta para Colombia resultaría inferior al 42% que, en promedio, se aplica actualmente en países de la OCDE, y particularmente al 40% observado en Chile.
Reflexiones al tema pensional
http://jujogol.blogspot.com.co/

No hay comentarios:

Publicar un comentario