El embarazo adolescente es una de las principales trabas para el desarrollo de una nación. Sin embargo, en las últimas décadas el retroceso ha sido protagonista en esta materia. Así lo considera Peggy Clark, quien habló con Portafolio sobre el tema en el marco de su visita a Colombia.
Empoderar a las mujeres es el camino más certero para reducir los índices de pobreza e impulsar el desarrollo de un país.
Así lo cree Peggy Clark, vicepresidenta de programas de política del Instituto Aspen, una organización estadounidense que busca impulsar el liderazgo para hacer frente a diferentes temas, quien está de visita en el país en el marco del foro “Mujeres Moviendo el Mundo”.
¿De qué tratará su charla?
Hablaremos de por qué el embarazo adolescente impacta la economía, y la relación entre este asunto y la pobreza. El propósito de este foro es mostrar lo que está pasando en Colombia y los aprendizajes en el mundo.
Es común que se hable sobre el embarazo adolescente, pero ¿qué impacto tiene en la economía?
Hay una etapa crítica en la vida de una mujer joven, entre los 11 y 15 años. Probablemente, es el momento en que es más vulnerable y más poderosa a la vez, pero desafortunadamente muchas caen en la prostitución, se embarazan, y eso cambia el curso de sus vidas: dejarán el colegio y ya no serán parte del desarrollo del país.
Estamos perdiendo ese activo para el futuro y esto pasa en todo el mundo. Se pierde el potencial para que se desarrolle ese capital humano.
¿Cuál es el rol de la mujer en el desarrollo de la economía?
Los programas que se enfocan en la mujer, generalmente, resultan en más beneficios para la familia y la comunidad en general, que cuando solo se invierte en los hombres. Vemos un gran movimiento en el mundo que promueve el emprendimiento femenino y su participación. Los países que más están creciendo son los que invierten en las mujeres.
¿Qué clase de programas recomendaría para empoderarlas?
No se trata solo de desarrollo económico, salud y educación, sino una aproximación integral.
Los programas más vanguardistas se construyen desde sus necesidades; se trata de hacer una intervención social, dignificar a la persona.
Hay aspectos culturales que inciden en el embarazo adolescente, ¿cómo trabajar con ellos?
Se trata de mostrarles que tienen otras oportunidades, además de casarse y tener hijos. La verdad es que ellas deben tomar la decisión de hacer algo diferente, deben sentirse empoderadas y fuertes para hacerlo.
El tema es encontrar una solución simple y elegante, que pueda ser replicada.
¿Cómo puede contribuir una compañía?
Más allá de las donaciones que puedan hacerse a fundaciones que trabajan programas alrededor del tema, es una buena idea que las empresas comiencen por sus empleadas, creando programas para las mujeres que trabajan con ellas y sus hijas.
¿Cuáles son los retos en este camino?
La participación política de las mujeres es una gran incógnita en el mundo, estamos en un punto de inflexión, la gente ha comenzado a aceptar la idea, pero no tenemos suficientes modelos.
Se habla de violencia contra la mujer, pero no hemos hecho suficiente progreso; la gente piensa que no es un problema tan grande, pero es enorme, apenas estamos comenzando a abrir la puerta.
Algunas personas dicen que solo es cuestión de tiempo para que la situación mejore, ¿qué opina?
No va a pasar a menos que presionemos. No puede asumir que el mundo arreglará la situación, no es la manera como las cosas funcionan.
Estamos aquí para decir que no estamos haciendo lo suficiente.
¿Cómo ve el panorama en Colombia?
Me sorprende que, teniendo tanta riqueza natural y de capital humano, en lugares como Cartagena el embarazo adolescente tenga una incidencia del 70 por ciento.
Me sorprende, porque uno piensa en este país como una nación muy avanzada. Tienen todos los factores a su favor.
LÍDERES GLOBALES SE DAN CITA EN BOGOTÁ
Hoy se lleva a cabo en el Country Club de Bogotá el primer foro internacional “Mujeres Moviendo el Mundo”, un evento liderado por la Fundación Juan Felipe Gómez Escobar en alianza con el BID, que busca generar un espacio para analizar temas sobre la pobreza mundial, el impacto de la mujer en la economía, la filantropía y la equidad de género.
Así las cosas, personalidades de la talla de Mayra Buvinic, senior fellow para la United Nations Foundation; Pat Mitchell, presidente y CEO del Paley Center for Media; la princesa Tatiana de Grecia; Vivian Torrijos, ex primera dama de Panamá; Carla Goldstein, cofundadora del Omega Women’s Leadership Center, y Cristina Falcone, asesora del presidente del World Economic Forum, entre otras, abordarán temas como las mujeres y el liderazgo en los medios de comunicación; innovación e incidencia en el ciclo de la pobreza, y las mujeres como generadoras de cambios sociales.
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