Muchos de los encuestados por Trabajando.com dicen que la única manera de mejorar los recursos de los hogares es mediante un puesto complementario.
Conseguir un empleo que se ajuste a los intereses de la persona no es lo único que atormenta a los profesionales colombianos.
El salario es otra razón de descontento en el mercado laboral.
Así lo confirman los resultados de una investigación realizada recientemente por la firma Trabajando.com.
Frente a la pregunta ¿considera que su salario es justo? el 69 por ciento de los encuestados respondió que no, mientras que el 31 por ciento contestó positivamente.
De la misma manera, el estudio hizo la consulta sobre lo que harían las personas consultadas para mejorar su ingreso salarial.
El resultado fue contundente: el 48 por ciento buscará trabajo en otra empresa para mejorar su situación económica. Un 25 por ciento aseguró que se dedicará a estudiar un posgrado, el 17 por ciento desea montar un negocio alterno para obtener dinero extra, mientras que el 10 por ciento restante estudiará otra carrera.
A las personas que quieren cambiar de trabajo se les preguntó en qué áreas están interesadas en emplearse. Un 38 por ciento se desempeñaría en el área de administración y comercio, el 23 por ciento en el área de educación, un 15 por ciento en otra área, el 8 por ciento en el área de humanidades, otro 8 por ciento en el área de ingeniería y arquitectura, mientras que el 8 por ciento restante lo haría en el área de la salud.
La Comunidad Laboral Líder de Iberoamérica presente en 11 países consultó a más de 2.300 colombianos en las principales ciudades.
La firma también preguntó sobre el nivel de estudios que tienen actualmente los consultados. El 35 por ciento respondió tener título universitario, el 31 por ciento es técnico o tecnólogo, un 20 por ciento posee titulación de posgrado, maestría o doctorado, mientras que el 14 por ciento restante cursó primaria o bachillerato.
El estudio se encargó de indagar sobre el ingreso promedio de los colombianos, según su formación académica, con el objetivo de conocer el rango y los salarios devengados por las personas que tienen trabajo.
A las personas con estudios en primaria y bachillerato se les preguntó sobre su ingreso salarial.
El resultado fue el siguiente: El 40 por ciento afirmó ganar entre 616.001 pesos mensuales y $1’000.000. Además, el 38 por ciento recibe 616.000 (salario mínimo) y el 22 por ciento gana entre uno y dos millones de pesos mensuales. El 40 por ciento de personas con titulación técnica y tecnológica gana el salario mínimo, un 38 por ciento entre 616.001 y 1’000.00 de pesos.
El 21 por ciento recibe entre uno y dos millones de pesos, mientras que el 1 por ciento obtiene entre dos y cuatro millones de pesos al mes.
A las personas con titulación universitaria, también se les preguntó cuál era su ingreso salarial.
El 42 por ciento gana entre uno y dos millones de pesos, un 22 por ciento obtiene un salario entre 616.001 y 1’.000.000 de pesos.
Por su parte, el 20 por ciento recibe entre 2’000.0001 pesos y 4’000.000 peos, el 8 por ciento 616.000 pesos correspondiente al salario mínimo, un 6 por ciento entre 4’000.001 pesos y 8’000.000 millones de pesos, mientras que un 1 por ciento recibe ingresos entre 8’000.001 y 10’000.000. Solo 1 por ciento obtiene más de 10.000.001 de pesos de ingreso.
POSGRADO
A los colombianos con titulación en postgrado también se les pregunto sobre su ingreso salarial.
Esto fue lo que respondieron los consultados: El 36% gana entre $1´.000.001 y $2´.000.000, un 32% obtiene entre $2´.000.001 y $4´.000.000. Por su parte el 18% recibe entre $4’000.001 y $8’000.000, un 9% más de $10’000.001, el 3% entre $8’000.001 y $10’000.000, mientras que el 2% restante obtiene entre $616.001 y $1.000.000.
Ricardo Garcés, country manager de Trabajando.com se refirió sobre el tema: Desafortunadamente, algunas veces hemos encontrado en este tipo de estudios que los recursos invertidos en educación y formación profesional, no se ven reflejados en el nivel de ingresos de las personas.
Esta es una de las causas de las altas tasas de deserción en las instituciones de educación superior, ya que en ocasiones podría parecer más rentable dejar los estudios para trabajar en otra actividad, así esté lejos de los intereses académicos y profesionales de los estudiantes universitarios.
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