lunes, 13 de enero de 2014

TRABAJO TECNICO - JURIDICO PRESENTADO POR LOS PENSIONADOS DE COLOMBIA

                                                   
CONCEPTO CASO DRUMMOND
Por: Dra. YOLANDA SALGADO B. (Enero 2014)

La Red Virtual Pensionados de Colombia, como siempre alerta a  los temas que  afectan al conglomerado de compatriotas, expresa su preocupación por el insuceso en la Bahía de Santa Marta, específicamente lo concerniente a la contaminación con el carbón que transportan las barcazas de la firma americana Drummond.  En tal sentido, nos permitimos modular desde el punto de vista jurídico-laboral y del medio ambiente.

Según los medios de comunicación, ha dicho la firma Drummond que ante una sanción pecuniaria muy alta impuesta por el Estado Colombiano, tendría que acudir al despido de aproximadamente el 80% de trabajadores de la compañía. Quiero ello decir, que una vez más,  es el proletariado el que asume las consecuencias por acciones de terceros.
 
Si los Tratados Internacionales y la normatividad colombiana vigentes, estipulan las condiciones necesarias para producir, negociar, despachar, laborar, exportar, importar, etc., en fin todas las operaciones comerciales desde Colombia, por qué permitir el posible sacrificio laboral de los trabajadores y sus familias?. Este es un aberrante esquema que atenta contra el núcleo de ocupación de los habitantes de esa región del Caribe y que estamos seguros no lo permitirá el gobierno, o como civilmente pudiéramos llamar fundo dominante (Colombia) frente al fundo sirviente (Drummond).

Y, es que exigir el cumplimiento de las normas y acuerdos, NO debe implicar cláusulas algorítmicas especiales para quienes  se codifican como Inversionistas o Empresas Extranjeras o Multinacionales, o cualquier otra denominación en materia económica, tributaria, financiera, etc., que tienen su base en la Patria Colombiana. Por lo tanto, es inaceptable que se reciban amenazas de despido masivo, la vulneración de los derechos constitucionales de los trabajadores, es  inminente.

Aunque este tipo de compañías, cumple con su tarifa tributaria, lo propio debe hacer con respecto a la protección del medio ambiente, por lo cual deben diseñar un agresivo plan de acción en ese sentido, a fin de nunca llegar a la toma de medidas drásticas o decisiones arbitrarias unilaterales que van en detrimento de los más débiles por la consecuencia inmediata y así mismo evitar catástrofes en la flora y fauna de este bello país. Precisamente, lo tocante a esta materia lo dejo a los expertos del ramo, como sigue. Pero antes dejo esta reflexión: “No le tengo miedo a los de afuera que quieren comprarnos, si no a los de adentro, que quieren vendernos”. Del autor Arturo Illia.
 
CONTAMINACION CON EL CARBON DE LA DRUMMOND EN SANTA MARTA
Por: BENJAMIN HERRERA REALES, Ing. Químico – Consultor

Mi querida Dra. YOLANDA SALGADO BLANCO, futura SENADORA para el periodo 2014–2018.

Mi concepto profesional sobre este tema es el siguiente:

Todo ser viviente sobre la Naturaleza, el cual haga parte de los reinos Animal y Vegetal, requiere para sobrevivir de la presencia directa del OXIGENO para poder mantenerse en equilibrio en su ciclo vital y poder desarrollarse y multiplicarse en el tiempo. Así que la FLORA y la FAUNA existente tanto en lo más profundo del mar, como en las áreas  que nos circundan en nuestro diario vivir, si le cortamos o disminuimos los niveles necesarios del OXIGENO presente en su entorno, produciríamos indiscutiblemente una ASFIXIA y consigo la MUERTE de ese ser vivo. Igual sucede con los seres humanos y hasta con los equipos mecánicos como los AVIONES que se sostienen en el Aire por el efecto de una Combustión.

Cuando una barcaza o planchón cargado con CARBON origina un derrame de este o cualquier otro  sólido que sea insoluble en el Agua, se origina un daño profundo y grave al ECOSISTEMA, ya que la capa del sólido que atrapa a la FAUNA y a la FLORA presente en el área del derrame , se ahogará, se asfixiará y morirá.

Algo peor o igual, sucede con la emisión al medio ambiente del POLVILLO DE CARBÓN emitido  en la explotación, transporte y manipulación del cargue y descargue para su EXPORTACION. Este polvillo afectará directamente además de la FAUNA y a la FLORA, a las personas que trabajan en el área, a los que viven anexos  a  sus equipos de producción y hasta a toda una comunidad, dependiendo de las corrientes de aire originadas  por los cambios de Temperaturas del Globo terráqueo.

Estos polvillos y buena parte de otros residuos contaminantes, tienen origen en la actividad industrial. Esta afirmación no tiene porque sorprendernos, pues no se trata de una novedad. Más aún desde la era de las cavernas ya el hombre era un depredador del ecosistema.  Toda actividad productiva y en general la simple cotidianidad del ser humano, esta signada  por la contaminación ambiental. Por consiguiente, nadie puede decir que no es un agente productor de desechos, en una u otra forma. De manera que el problema no se trata de producir factores de deterioro al medio ambiente sino de evaluar lo que hacemos con el apoyo de la ciencia y la tecnología para implementar mecanismos de control o mitigación a este impacto. Y con seguridad, que lo que hacemos nunca será suficiente. Siempre tendremos retos y metas que cumplir. Por eso todos estamos en deuda con la vida y la naturaleza.

Será que el ser humano, deberá cruzarse de brazos y dejar de producir para no contaminar? De ninguna manera podemos frenar el desarrollo económico. Requerimos de muchos productos para mantenernos a la altura del confort del Siglo XXI y ellos los suministra en un alto porcentaje el sector industrial.  Por eso no podemos satanizarlo o despotricar contra él. Nos proporciona fuente de empleo y un porcentaje significativo de nuestra riqueza, que ya se está diferenciando como PIB verde, cuando no deja estragos al entorno. Muchas veces hemos visto críticas tendenciosas y salpicadas de intereses, sin objetividad y con intenciones non santas, que en nada nos favorece.  Debemos por el contrario fomentar la política de la buena relación y de hospitalidad a los inversionistas y empresarios en general. No quiero decir, que la actividad productiva debe darse a cualquier costo, debido a la motivación económica. La sociedad, los consumidores de artículos específicos y los organismos de control gubernamental, debemos exigir la aplicación del concepto de desarrollo sostenible, de producción más limpia y la normatividad vigente.

Ya existen muchas empresas que trabajan dentro de estos parámetros e incluso algunas tienen certificación de ISO 14.000, OSHA 18.000 (Seguridad, Salud e Higiene).  Evaluemos, por lo tanto cuales son las que cumplen y cuáles no, con el rigor científico y jurídico. Organicemos el Nodo de Producción Más Limpia, como lo tienen otras Ciudades del país y del mundo. Hagamos los reconocimientos públicos a las que responden y cumplen con las metas y califiquemos de acuerdo a la Ley a las que están en mora, las que se encuentran al margen de los principios de Salud Ocupacional, afectando incluso hasta sus propios empleados y trabajadores y desconociéndoles los derechos legales establecidos para compensar los efectos de deterioro psicosomáticos como producto de la exposición a los que son sometidos durante su tiempo de permanencia en plantas con procesos clasificados como de “ALTO RIESGO”.

Hoy en día los costos ambientales y particularmente en el sector industrial, constituyen inversiones y no gastos, por cuanto esta gestión les representa imagen ante la opinión pública, en el mercado interno y externo y por lo tanto más ventas. Amén de que los tales “desechos”, constituyen a la postre productos intermedios que pueden ser reciclados, reutilizados o integrados como materias primas para la elaboración de subproductos. Existe tecnología para la recuperación de casi toda sustancia, metal, no metal, plásticos, etc., que aplicada con criterio rentable puede ser otra alternativa productiva para una empresa. En el Departamento del Atlántico, muchas de ellas han hecho inversiones importantes en este sentido, pero que desafortunadamente no son conocidas por la opinión pública, ni por las comunidades vecinas. La Responsabilidad Social Empresarial, convoca a integrarse con el medio social y asegurar que tanto este como el consumidor final reciban beneficios sin que a largo plazo los efectos de los contaminantes se magnifiquen.

Si los residuos originados por un derrame, por una mala operación etc., se siguen descargando al Mar o al Río Magdalena por ejemplo y permitimos que estos  se entierren en el subsuelo, estaremos contribuyendo a destruir nuestra nave espacial, llamada tierra, en la que discurrimos en el universo, botando de contera una fuente de riqueza. Las entidades ambientales locales, regionales y nacionales, no pueden seguir trabajando con tanta laxitud, están en mora de asistir ambientalmente y de hacer cumplir las leyes.  Casos como los derrames de CARBÓN aceptados públicamente por la DRUMMOND, constituyen vectores de propagación de enfermedades, que los entes de salud no han registra públicamente y que son causa de la mortalidad y morbilidad debido a los contaminantes gaseosos, líquidos y sólidos que aceptamos  en forma irresponsable ante una sociedad inerme y desarmada. 
CONCLUSIÓN

La explotación y mal manejo del CARBÓN, representa un grave riesgo de contaminación en el medio ambiente, debido a que su  trituración, las perforaciones y el paso del viento por los yacimientos y almacenamiento al Granel sin ninguna protección técnica,  producirá  un emisión de polvillo que provocará indudablemente serios  problemas químicos, térmicos y físicos en el medio ambiente, los cuales afectarán directamente a nuestra flora y fauna. Además, produce repercusiones en la salud y calidad de vida de las personas que viven y se desarrollan cerca de los lugares de explotación y manejo industrial.

Las enfermedades respiratorias relacionadas con el polvillo del Carbón, podríamos enunciar lo siguiente:
Silicosis: Enfermedad antigua de personas que han inhalado polvo de sílice (elemento que constituye la arena y polvo), siendo frecuente entre los mineros del metal, los cortadores de piedra arenisca y granito y de obreros de las fundiciones. Este polvo entra en los pulmones y y taponan los alveolos afectando así a  las células depuradoras.

Este polvo entra en los pulmones y las células depuradoras de nuestro cuerpo (macrófagos) la ingieren, liberando enzimas que forman un tejido cicatricial en las áreas  pulmonares impidiendo el paso del oxígeno a la sangre de forma normal. Consecuencia de esto, los pulmones pierden elasticidad, produciéndose en un comienzo pequeñas protuberancias redondas (silicosis nodular simple) y finalmente al juntarse producen grandes protuberancias (silicosis conglomerada) llevando finalmente a las personas a “paros respiratorios”. Síntomas: tos, flemas debido a la irritación de las grandes vías aéreas, bronquitis, ahogo. Esfuerzo excesivo del corazón, causando insuficiencia cardiaca, que a su vez puede evolucionar en la muerte.

Fibrosis Progresiva: El tejido pulmonar y los vasos sanguíneos de los pulmones se destruyen por las cicatrices, empeorando incluso si la persona ya no está expuesta al polvo de carbón.
Para terminar, el incidente de la barcaza de la Drummond en la ciudad de SANTA MARTA, es solo la punta del iceberg del efecto que está teniendo el carbón sobre los habitantes de la capital del Magdalena. Todo en Santa Marta está al carbón. No son grandes bloques del mineral, nadie podría verlo y guardarlo en un costal, muchas veces ni siquiera es perceptible al ojo humano. Es un polvillo que los fuertes vientos de la Costa arrastran sobre toda la ciudad, sobre el mar, sobre los cultivos y que va envenenando lentamente. Así lo muestran estas fotos de Federico Ríos. (Ver y Leer el artículo de la SILLA VACIA).
Santa Marta al carbón (Artículo de la SILLA VACIA)

Por: Federico Ríos, Jue, 2013-02-14 21:18 

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