En el editorial del 14 de enero, El Espectador afirma que “(c)uando se trata de corrupción, los colombianos siempre terminan (terminamos) perdiendo”.
Es verdad de a puño. Quienes tienen la misión de robarse los bienes públicos tienen asesores en contratos que los redactan de tal manera que roban, pagan poca cárcel y pueden pedir adición de pagos por hechos sobrevinientes.
A esos ladrones no les interesa el empleo, sino el manejo de los contratos y de las coimas. Como son expertos en robar, y tienen asesores expertos para contratar y robar, no les causa daño que les digan ladrones y menos en una sociedad en la que no hay sanción social.
Esos ladrones son muy instruidos porque tienen posgrados, hablan varios idiomas y son de alcurnia en sus diferentes niveles sociales, pero son muy mal educados porque los han formado para elegir el obrar mal en vez del obrar bien.
Los que redactan las leyes y evitan que sean debatidas las hacen a la medida de los ladrones de cuello blanco. Es muy difícil que se dicten normas para renunciar a prebendas o privilegios.
Si los ladrones de bienes públicos tuvieran como pena 20 o 25 años de prisión en cárceles comunes con la obligación de pagar el valor real de su estadía en la cárcel, sin poder redimir penas, y devolver efectivamente el doble de lo que se roban para tener como beneficio la excarcelación, sin perjuicio de las inhabilidades vitalicias para contratar, recibir pensión pública, prohibición de ser reemplazados en cargos públicos por sus parientes de derecho y de hecho hasta el cuarto grado, posiblemente el robo se disminuiría.
A esto hay que agregar que los entes de control deben poder hacer advertencias sobre posibles fraudes y los bienes comprados por el Estado deben adquirirse a precios de comercio. Es infame que se avale la compra de un bulto de cemento por $50.000 a sabiendas de que el valor real es de $20.000 en el mercado, y en la misma proporción otros materiales o servicios.
Dejo estas ideas para estudio de la comunidad y de los entendidos en proteger los bienes del Estado para que no sean objeto de robo por los expertos en redactar contratos para robar y pedir pagos adicionales.
Carlos Fradique-Méndez, abogado.
¿Ser corrupto paga?
En el corrupto, hay celebración en entornos sociales y familiares, quienes lo ven como un HÉROE que logró “CORONAR COMO OTROS” y asegurar una estabilidad económica para su familia y....
Reflexiones al tema pensiones
No hay comentarios:
Publicar un comentario