lunes, 7 de enero de 2013

¿Cómo se distribuye un salario mínimo en Colombia?


Por: Redacción negocios
La propuesta del Dane no coincide con la que deben hacer los trabajadores. Según el más reciente informe del Dane “Participación de los grupos en la canasta familiar” (de noviembre de 2012), que mide los ingresos y gastos destinados para suplir las necesidades básicas en los hogares del país, en 2012 los colombianos que ganaban un salario mínimo lo distribuían de la siguiente manera:

·                     Alimentos $173.077 (29,36%)
·                     Vivienda $228.549 (38,77%)
·                     Vestuario $7.722 (1,31%)
·                     Salud $26.881 (4,56%)
·                     Transporte $59.244 (10,05%)
·                     Educación $70.209 (11,91%),
·                     Diversión $0 (-0,67%),
·                     Comunicaciones $6.956 (1,18%)
·                     Otros gastos $20.868 (3,54%).

Sin embargo, casos como el de Sandra Albañil, prestadora del servicio de limpieza para una empresa que le garantiza todas las prestaciones, las cifras no coinciden con su realidad.

“Yo me gastaba mucho más en transporte de lo que me daban en subsidio ($67.800), tenía que completar con otra plata del sueldo”, afirma, y agrega que su propia distribución del dinero sería así: $150 mil para alimentación, $130 mil para vivienda, para vestuario no cuenta con presupuesto, para salud $10 mil, para educación $40 mil, para diversión $20 mil, para transporte $100 mil, para comunicaciones $20 mil, y uno de los rubros más importantes para ella, del que no se habla en el informe del Dane: los servicios públicos, para los cuales destina $150 mil.

Una situación similar vive Soraya Guzmán, quien también trabaja en servicios de aseo.Para ella el gasto más importante es el de la salud, debido a que uno de sus hijos padece una parálisis en la mitad de su cuerpo y debe reservar alrededor de $130 mil para medicinas y transportes.

También asegura que el presupuesto para el vestuario es nulo y para la diversión es esporádico, y cuenta que “yo recibo una pensión por el papá de mis hijos, pero si estuviera yo sola trataría de reducir los gastos en alimentos”.

Por su parte, Albañil comenta que a pesar del aumento del salario mínimo, que pasó de $566.700 a $589.500, seguirá ajustando con dificultad su presupuesto. “Es muy difícil. Todos los precios de la canasta familiar incrementan sin que todavía hayamos recibido el primer sueldo del año, y como siempre, seguiremos a lo largo de los meses pensando en cómo hacer rendir la plata”.

1 comentario:

  1. SIN COMENTARIOS DE NINGUNA CLASE, YA QUE ES INCOMPRENSIBLE ESTO....

    ResponderEliminar