Noelia
Cigüenza Riaño - nciguenza@larepublica.com.co
La Plenaria de Senado aprobó el control fiscal preventivo y concomitante. Además, se mantuvieron las contralorías territoriales
Luego de varios meses de largas
discusiones y pese a los reparos iniciales de los gremios, la reforma a la
Contraloría General de la República que propuso el actual jefe del ente de
control Carlos Felipe Córdoba llegó a su octavo y último debate y, después de
más de ocho horas de debate, fue aprobada en la plenaria de Senado y será
efectiva en este periodo. En esta, se dio luz
verde a cambios como el del control preventivo, sin revivir la figura que
existía antes de 1991.
Con
esta nueva facultad, la Contraloría podrá de nuevo hacer un seguimiento
permanente de los recursos públicos a través de un control fiscal preventivo y
concomitante. Este es uno de los cambios que más polémica había creado debido a
las experiencias del pasado y a la posibilidad de que este control pudiera
convertirse en una coadministración por parte de la entidad. Por ello, los
congresistas le hicieron la modificación de que ‘será’ siempre preventivo y se
hará de manera excepcional.
“Llegamos al Palacio de Nariño a
expulsar cualquier tipo de corrupción y queremos que se expanda el control
fiscal de manera preventiva para que se aumente el número de recursos que son
controlados. Solo 0,4% de los recursos se recuperan. Con este nuevo modelo, no
se vuelve al control previo porque este es preventivo y necesita del concurso
del Gobierno”, manifestó Francisco Chaux, viceministro de Relaciones Políticas
del Ministerio del Interior.
Por
su parte, las voces en contra como la del senador por el Partido de la Alianza
Verde, Iván Marulanda, indicaron que anteriormente la Contraloría se encargaba
de hacer una persecución política sistemática. “No se pueden entregar los
mismos poderes para obstaculizar los intereses y hacer favores”, sostuvo
De acuerdo a lo aprobado, este
control tendría un carácter excepcional y se realizaría en forma de advertencia
al gestor fiscal. Además, deberá estar incluido en un sistema general de
advertencia público. También se indicó al casi al final del debate que este
control efectivo no se daría en las contralorías territoriales y que estas
serían elegidas por los concejos y las asambleas a través de convocatoria.
“El
nuevo modelo no tendrá como denominador común las imposiciones. La idea es que
las dependencias administrativas sean enteradas oportunamente de las
observaciones de la Contraloría, cuando haya lugar a ellas”, sostuvo el
contralor Felipe Córdoba.
De
otro lado, los congresistas aprobaron el artículo uno que indica que los
resultados de los ejercicios de vigilancia y control fiscal, así como de las
indagaciones preliminares o los procesos de responsabilidad fiscal, adelantados
por las Contralorías, tendrán valor probatorio ante la Fiscalía General de la
Nación y el juez competente.
Igualmente,
se aprobó el artículo dos que implica que la Contraloría llevaría un registro
de la deuda pública de la nación y de las entidades descentralizadas
territorialmente o por servicios. Además, este recoge que el contralor tendrá
nuevas atribuciones como la de revisar las cuentas que deben llevar los
responsables del erario y determinar su grado de eficiencia.
Autonomía presupuestal
Otro de los puntos que se aprobaron fue el aumento del
presupuesto para que este organismo de control pueda ser una entidad
fortalecida. Se indicó que se garantizará la autonomía presupuestal y la
sostenibilidad financiera y se dará unas apropiaciones progresivas que incrementarán
en el Presupuesto de la Contraloría durante las siguientes tres vigencias en
$250.000 millones, $250.000 millones y $136.000 millones, respectivamente.
Durante
la discusión, se abrió la posibilidad de eliminar la figura del Auditor General
de la Nación; sin embargo, finalmente se mantuvo. Este será escogido por el
Consejo de Estado de una terna enviada por la Corte. Además, su periodo será de
cuatro años y no de dos como antes a partir de la elección del próximo auditor.
“Es
importante que los contralores tengan control. Hoy soy yo, pero mañana será
otro. Si hay 65 contralorías debe existir el cargo de Auditor General de la
Nación”, manifestó Felipe Córdoba cuando defendió a los congresistas la figura
del auditor.
No se eliminan las contralorías
territoriales
También pese a que se debatió la posibilidad de eliminar las contralorías
territoriales, un punto en el que estaban de acuerdo varios senadores entre los
que también estaba el expresidente Álvaro Uribe, finalmente no se aprobó este
punto. En este se aclaró que ya no habrá concurso de méritos, sino que los
concejos y asambleas elegirán a los contralores territoriales mediante una
convocatoria.
"Hemos
propuesto eliminar contralorías departamentales y municipales y la Auditoría.
Habría ahorro de 600.000 millones para fortalecer la educación y la
salud", sostuvo Uribe antes de tomar la decisión.
De
acuerdo con el proyecto inicial, los contralores departamentales, distritales y
municipales serían elegidos por concurso de méritos, siguiendo los principios de
transparencia, publicidad, objetividad, participación ciudadana y equidad de
género, por un periodo de cuatro años que no podrá coincidir con el periodo del
correspondiente gobernador y alcalde.
Según
la exposición que ha hecho el Contralor, hoy en día este órgano de control que
se quiere reformar solo alcanza a tener una cobertura de 29% y tiene una
recuperación de solo 0,4% de los recursos. Además, presenta problemas como que
la Delegada del sector de infraestructura solo cuenta con 25 ingenieros para vigilar
a todo el sector o que la Delegada del sector social solo cuenta con un médico.
Los
órganos de control que más recursos recibirán para el próximo año
La Contraloría es el segundo órgano de control que más recursos recibiría para
el próximo año según el proyecto del Presupuesto General de la Nación para
2020. El primero de ellos es la Procuraduría que recibiría $795.438 millones y
a este le seguiría la Contraloría con $575.910 millones. Los 3.984 cargos en la
Contraloría tendrían un costo de $432.100 millones y, en inversión, esta
entidad cuenta con recursos para la actualización de la infraestructura física,
funcional y operativa, así como mejoras en su plataforma.
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CARLOS FELIPE CÓRDOBA
CONTRALOR GENERAL DE LA
REPÚBLICA
“Se necesita mantener
la figura del Auditor General de la Nación. Existen actualmente 65 contralorías
y es importante mantener un control”.
FRANCISCO JOSÉ CHAUX
DEL MINISTERIO
DEL INTERIOR
“Se trata de una
importante modificación constitucional para que el control fiscal sea
preventivo y concomitante, es decir, que pueda llegar a tiempo”.
El Congreso aprobó, con algunas modificaciones, la reforma a la Contraloría
Excelente la intenciones de cambio, pues el paso que se da, por la aprobación del control preventivo, hubiera sido mas efectivo si se extendiera a los controles departamentales y municipales. .Hasta cuando ? Porque le temen tanto a esos controles territoriales ?
ResponderEliminarSolo queda esperar, que estos cambios sean efectivos con un verdadero control fiscal, y recuperar esa confianza perdida. La duda siempre queda, en los controles municipales y departamentales, pues con esta estructura que hoy se tiene, ese roto sigue abierto....