www.cronicadelquindio.com SEPTIEMBRE 29 DE 2022
Si el país conociera lo que es el Marco Fiscal de Mediano Plazo, identificaría de una los errores fiscales de gobiernos como el del expresidente Duque. Lo que recibió el gobierno nacional en 2018 obligaba ajustes que no se hicieron; se quedó quieto el mandatario y eso, unido a sus intenciones, que se ve reflejado en el presupuesto 2023, le representa al nuevo gobierno hacer lo que su antecesor no hizo. A futuro, en la elaboración del plan financiero, el presupuesto y M.F.M.P., este debe tener un proceso de control, sin ocultar nada que obligue cumplir con sanciones duras, de lo contrario seguirán tapando negligencias y deficiencias del Congreso, convertidas en daños al país.
Sin definir el valor estimado de recaudo de la reforma tributaria, es prematuro aprobar el monto del presupuesto 2023. Se inicia la lucha de intereses, unos en defensa al gobierno, otros para que sus regiones sean independientes y, la oposición creando discusiones inútiles sin ni siquiera tocar la inflexibilidad de gastos. “Los intocables” dañan las finanzas del país, perdiendo la opción de poder ver a la oposición presentar sus aportes para construir un mejor país.
Esta es una democracia en la que miles de ciudadanos apuestan a un juego limpio, pero, la historia muestra que en el paso por las comisiones del Congreso, sus ponentes aprueban el presupuesto acudiendo a esas mañas viejas, con congresistas y partidos que por ese vacío ético van por sus cuotas para sostener su poder y otros se empeñan en logar un poder que no tienen y no han tenido. Saben que revisarán y aprobarán el presupuesto 2023 del país y el de Regalías 2023-2024, les fascina estar disfrazaron de buenos, ya están en el pacto, sacarán millones de recursos para sus amigos y para financiar las elecciones locales 2023. De no existir un control claro, se repetirá la triste hazaña del 2022: mal uso de dineros como los del OCAD PAZ y otros ejemplos que el país conoce.
Un país donde existe una corrupción sin control, gastos, giros y beneficios tributarios inmensos que no eliminan, una deuda creciendo con un déficit fiscal imparable que no controlan, la regla fiscal que obliga reducirlo, una inflación propia y externa desbordada, la calificación de riesgo del país en nivel crítico y otras más es el panorama.
De no actuar a conciencia, con ética el Congreso y los partidos, jamás alcanzará presupuesto alguno. Si no son capaces de reconocer y rectificar los errores, que valen billones al país y siguen así, sin corregir nada, ahí estará siempre el hueco que dejan. Se continuará abriendo un espacio y permanecerá la urgencia de otras o más reformas tributarias, de esas que molestan al país, que generan protestas y marchas. Este es el precio de la negligencia del Congreso, por no actuar con verdadero profesionalismo. Hoy sufre el país por ese abandono de ustedes como congresistas. Actúen ya, sean sinceros y no destruyan más al país.
¿Quién vigilará los presupuestos?
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Video ampliado articulo: https://youtu.be/iCeP68VQ6YU
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