ALDO CIVICO
Me
atrevo a proponerles una estrategia para ayudarles a escoger al próximo alcalde
de Medellín (o cualquier región de Colombia **).
Cuando les pregunto a varios de mis amigos si ya tienen claro por
quién van a votar, se encogen de hombros, y me dicen que nadie les inspira
confianza, lo que, en la mayoría de los casos, significa que saben con claridad
por quién no votar, pero todavía no conocen lo suficiente las otras opciones.
Entonces, ¿con cuáles criterios evaluar a los candidatos?
Al fin y
al cabo, podemos mirar a una campaña electoral como a una entrevista para
contratar a alguien. Entre los candidatos, ¿a quién contrataría para
administrar su finca, o su empresa, o sus fondos de inversión? ¿A quién
contrataría para ser mentor de sus hijos?
A lo mejor no miraría solamente las
cualidades y competencias profesionales, también es fundamental considerar el
carácter ético o moral de los candidatos a la alcaldía, su trayectoria de vida.
Entonces, sugiero utilizar los arquetipos que los pueblos originarios emplean
para referirse a las cualidades de un buen líder: el guerrero, el curandero, el
visionario y el maestro.
En las
culturas ancestrales, el guerrero es muchas veces considerado como alguien que
sabe dar respeto y honor, porque reconoce y aprecia la diversidad que está en
él y en los demás. Es alguien transparente y coherente; dice lo que piensa, no
es mentiroso. Su intención es declarada y pública. El guerrero es responsable y
disciplinado porque es consciente de las consecuencias de sus acciones. Piensa
en el bien común, y no en intereses privados. Vale la pena preguntarse: ¿Cuáles
de los candidatos tienen este espíritu guerrero?
En la
mayoría de las culturas indígenas, el curandero se enfoca en lo que tiene
corazón y significado. Es consciente del poder transformador del amor. Por eso
sabe aceptar, reconocer, validar, y expresar gratitud. Sabe sanar y es un
catalizador del cambio. Preguntémonos: ¿Cuáles de los candidatos ha demostrado
que aplica la empatía y la compasión? ¿Quiénes han practicado el poder
transformador del amor?
El
tercer arquetipo es el visionario, quien está caracterizado por decir la
verdad, sin juzgar. Es alguien motivado por un propósito superior al que
entrega sus conocimientos, talentos y vida.
Como decía Gandhi, “Mi vida es mi
mensaje”. El visionario es también alguien auténtico, que tiene conciencia de
su esencia, y la encarna en el mundo con coraje y valentía. ¿Cuáles de los
candidatos han demostrado entregarse a un propósito superior?
Finalmente,
el cuarto arquetipo del liderazgo es el maestro, quien tiene sabiduría y nutre
la confianza. Por eso tiene claridad, objetividad, capacidad de discernimiento,
desapego; características en las cuales radica la sabiduría. Además, confía en
el futuro que quiere emerger y facilita su realización.
Por eso, además de la
palabra, valora igualmente al silencio. Preguntémonos: ¿Quiénes entre los
candidatos han cultivado en su vida la sabiduría y la confianza? Ojalá los
ciudadanos de Medellín (o de Colombia) tengan la lucidez para escoger como próximo alcalde a
alguien que refleje las virtudes y las prácticas del guerrero, del curandero,
del visionario y del maestro.
Reflexiones al tema pensiones
Twitter: @orregojj
Cómo elegir al próximo alcalde. Amigos: Hagamos este ejercicio:Entre los candidatos inscritos en su región, usted si pudiera,a quién contrataría para administrar su finca, su empresa, sus fondos de inversión? ¿o para ser mentor de sus hijos ? https://jujogol.blogspot.com/2019/09/como-elegir-al-proximo-alcalde.html?spref=tw
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